Definitivamente es algo muy asertivo,
decir que el hombre se cansa, se aturde, abruma de tantas peleas,
pero nunca falta en la vida de una persona, por lo menos una relación
que se base en ellas, y no hay nada más dañino para una unión de
pareja que los celos excesivos y los conflictos constantes y sin
fundamentos, es un escenario por demás incomodo, pesado y muy
desagradable, que pocas personas saben llevar a cuesta o tolerar,
estas son enemigas de una relación duradera armoniosa y amorosa. No
se puede negar que es absolutamente normal las paleas y los celos en
una relación de pareja, es algo que se ve hasta en las mejores
familias, pero hay que saber conocer los limites y cuándo y cómo
parar, sin llegar a los extremos, las ofensas, los maltratos,
atosigar al otro con celos enfermizos y sin fundamentos, con el
tiempo se convertirá en una relación asfixiante, que de seguro, más
tarde que temprano terminara en infidelidad, un rotundo fracaso,
divorcio, separación, en el peor de los casos.
Si una mujer desea amarrar a su hombre,
debe ser muy tolerante e inteligente y aprender a manejar las
situaciones adversas, cada vez que se le presenten, porque no hay
nada que aleje más a los hombres que una mujer histérica, celosa y
peleadora. Es como echar a su chico a los brazos de otra mujer, con
lazo y todo. El hombre que suele vivir en una ambiente hostil, llenos
de inseguridades, es sin duda alguna, el que tendera más a la infidelidad, a los engaños y las mentiras, ya que siempre se querrá
mantener alejados de su pareja y del ambiente que le rodea, no es
sano, ni mucho menos inteligente, enloquecer a un hombre con una
severa desconfianza, porque esa sera la forma más sencilla y rápida
de alejarlo de su lado. Nadie dijo que la convivencia era fácil,
pero hay que aprender a sobrellevar y reponerse de las situaciones
incomodas e indeseadas, de eso se trata las relaciones
interpersonales, de respetar los pensamiento, criterios de los demás,
de aceptar la opinión de los demás, así no tengan nada que ver con
sus ideales.
Las mujeres con celos y peleas no
devuelven a los hombres a su cama, por el contrario lo alejaran cada
vez más, a diferencia de una chica con sus pasiones, es por esta
razón que muchos hombres le son infieles a sus mujeres para dejar de
un lado una relación conflictiva y dar dar rienda suelta a una llena
de momentos gratos y alegres, de complacencia mutua, donde no haya
inseguridades, ni desconfianza, donde reine el deseo, las pasiones, y
ellos sean protagonista de una hermosa historia erótica.